Este Pentecostés, recordemos la iglesia iraní, una de las más antiguas del mundo.

Los recuerdos son breves y la información importante puede perderse con el tiempo. Esa niebla de la memoria colectiva y los acontecimientos posteriores pueden moldear lo que las generaciones futuras creen o piensan y, en consecuencia, cómo actúan.

Tomemos como ejemplo a Irán. Una serie de acontecimientos ocurridos en 1979 en Irán remodelaron profundamente el paisaje del país, a saber, el derrocamiento del Shah, el ascenso del ayatolá, las protestas eruptivas y el establecimiento de la República Islámica.

Debido a estos acontecimientos, el mundo occidental piensa en Irán como una nación islámica. Pero la verdad es que Irán alberga la iglesia más antigua del mundo.

Verá, en el Día de Pentecostés, como está documentado en el Libro de los Hechos del Nuevo Testamento, nació la iglesia global. Los iraníes estaban allí y estaban entre los primeros conversos a Cristo.

Al leer el relato de Lucas en Hechos 2, ocurre algo sorprendente. El Espíritu Santo desciende sobre los Apóstoles y sus seguidores, dándoles la capacidad de hablar en otros idiomas. La multitud reunida en Jerusalén para la festividad de Shavuot quedó desconcertada por lo que vio, reconociendo que estos hombres eran de varias regiones, cada una con su propio idioma.

Hechos 2 dice:

“Y estaban asombrados y atónitos, diciendo: ‘¿No son galileos todos estos que hablan? ¿Y cómo es que escuchamos, cada uno de nosotros en su propia lengua materna? Partos, medos, elamitas y habitantes de Mesopotamia’”.

Luego, Lucas enumera una serie de otras nacionalidades presentes.

¿Pero te diste cuenta de los tres primeros mencionados: “partos, medos y elamitas”? ¡Todos estos grupos étnicos eran de Persia, que hoy se conoce como Irán!

Esta reunión diversa en Jerusalén subraya el impacto multinacional de Pentecostés, convirtiéndolo en un momento fundacional no sólo para aquellos en Jerusalén sino para muchas tierras distantes, incluida Persia.

Hechos continúa:

“…los escuchamos contar en nuestras propias lenguas las maravillas de Dios”.

Los acontecimientos que se desarrollaron en Jerusalén hace más de 2.000 años siguen resonando en el panorama religioso del Irán actual.

Después de Pentecostés, el cristianismo se extendió por todo el mundo. El cristianismo echó raíces en Persia muy rápidamente y las primeras comunidades cristianas florecieron.

Sin embargo, el zoroastrismo, una religión falsa, mantuvo el poder en Irán. El gobierno persa era zoroástrico y los cristianos enfrentaban persecución. La dinastía persa creía que los cristianos apoyaban al Imperio Romano rival y les imponía fuertes impuestos. Cuando los líderes cristianos se negaron a imponer estos impuestos a sus hermanos en la fe, el gobernante de la época declaró que los cristianos serían ejecutados por deslealtad.

A pesar de ser una minoría, el cristianismo continuó en Irán. El zoroastrismo finalmente fue reemplazado por el Islam. Los cristianos enfrentaron dificultades como conversiones forzadas y martirio. Sin embargo, persistieron, adaptándose a los cambios en la cultura y la política a lo largo de los siglos.

En los tiempos modernos, los cristianos iraníes siguen mostrando resiliencia. Practican su fe en una sociedad musulmana chiita, a pesar de las estrictas regulaciones impuestas por la República Islámica de Irán. Estas normas se dirigen especialmente a quienes se convierten del Islam. La luz de Cristo no puede apagarse, ya que muchas personas, incluso hoy en día, se reúnen para adorar en iglesias clandestinas y practican su fe en secreto para evitar la persecución.

¡Lo que es aún más sorprendente es que el cristianismo está creciendo en Irán! Esas primeras semillas del Evangelio, plantadas por los primeros partos, medos y elamitas que regresaron y compartieron a su recién descubierto Salvador, ahora han crecido hasta convertirse en una gran cantidad de iglesias vibrantes que creen en la Biblia y adoran a Jesús.

Creo que Irán será la primera nación musulmana en volverse a Dios. Dios dice en Jeremías 49:38: «Pondré mi trono en Elam».

Los iraníes estuvieron allí desde el mismo nacimiento de la iglesia cristiana y, por la gracia de Dios, seguirán siendo utilizados para ganar cada vez más musulmanes para Cristo.

El Dr. Hormoz Shariat es el fundador de Iran Alive Ministries, que utiliza la televisión satelital para llegar a los millones de personas perdidas y destrozadas en Irán y el resto del Medio Oriente. El es el autor de El gran despertar de Irán.

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